Techo para mi País; Una experiencia Inolvidable

Un techo para mi país es una experiencia de vida inolvidable, que me ha abierto los ojos y ayudado a experimentar y sentir los que personas de escasos recursos carecen y diferenciar entre la vida que me ha tocado vivir y la que miles de personas están viviendo en condiciones que yo solo me imaginaba suceden en África (por llevarlo a los extremos) y que me ha ayudado a comprender y abierto los ojos ante la pobreza de muchas personas. A su vez esta experiencia me a sensibilizado y sobre todo enseñado a valorar las cosas que uno tiene y las condiciones en las que uno afortunadamente esta viviendo.

Pero bien esta entrada al blog es para contarles de la magnifica y grata experiencia de participar en Un Techo Para Mi País. De verdad que es una experiencia no solo de construcción y trabajo duro, a mi parecer es una de esas experiencias que una vez que las realizas no puedes dejar de repetir. Les contare de lo que se trata, es a grandes rasgos ir a comunidades de escasos recursos y construir una casa a base de madera en tres días continuos, por lo que la experiencia permite una convivencia única centre voluntarios, entre cuadrillas y familias y de igual forma permite que las amistades se vuelvan mas fuertes y los lazos entre los miembros de las familias ayudadas se entonen más por la convivencia directa con ellos. A mi me toco una familia de dos integrantes, Don Gavino (en la foto) quien lamentablemente perdió la vista y su esposa Doña Tere quien desafortunadamente es sorda, esto podria hablar un poco de las situaciones por las que pasan cotidianamente y de las dificultades que tienen para conseguir un poco de ingreso económico para sobrevivir en una comunidad de esta a 5 horas de camino a pie de el centro del poblado más cercano. La experiencia de convivir con Don Gavino y escuchar sus historias interminables, que me permitieron reír, sensibilizarme, agradecer es parte de lo que viven cada voluntario en las diferentes cuadrillas con diferentes familias e historias. Las familias y la convivencia con ellas son fundamentales para crear una verdadera conciencia en los voluntarios. Por otra parte esta la construcción que es pesada, con sus diversas dificultades en cada terreno y también diversos accidentes de integrante (jaja) es otra experiencia que te permite experimentar el sentimiento de realización al final de la construcción y es aun más placentero mostrarles el resultado final a las familias que tal vez jamas se habían imaginado tener una casa propia y el gran pago que uno como voluntario recibe es la sonrisa y alegría de las familias que no se les borra de la cara cada vez y que me llenan de lagrimas los ojos.

Sin duda alguna es una experiencia que no negaría jamas, y es un hecho que contaran con mi apoyo en las próximas construcciones y de igual forma que esta, lo haré con todas las ganas y las esperanzas de hacer un cambio en mi sociedad.

De verdad !Vive la experiencia¡ !Es magnifica¡ y mil palabras no la describen